O en los que la persona intuye que será complicado obtener ayuda en caso de padecer un ataque de pánico.
Los temores agorafóbicos suelen estar relacionados con un conjunto de situaciones características, en los que la persona que lo sufre anticipa que lo pasará mal como por ejemplo: montarse en un avión, estar lejos de casa o en medio de un concierto con la puerta de salida demasiado lejos, ir al cine, cenar o comer en un restaurante, estar en un lugar cerrado, usar el transporte público, ir al centro comercial, estar en la cola del mercado,… En otras ocasiones, el miedo tan sólo es la anticipación de que pueda volver a repetirse una crisis de pánico en un lugar donde previamente se sufrió uno.
Y, concretamente, es esa angustia la que ayuda a desarrollar un comportamiento de evitación que poco a poco va limitando la vida cotidiana. En otros casos, puede que la persona que padece este trastorno no vea tan limitado su día a día ya que es capaz de organizar su entorno dotado de un dispositivo de acompañantes que le ayuden a superar esa crisis o simplemente logra escapar de esa situación con gran malestar.
Síntomas asociados a la Agorafobia.
La persona que sufra este trastorno tratará de evitar en la medida de lo posible todo el conjunto de acontecimientos que provocan su cuadro de ansiedad y que han sido detallados anteriormente.
En el caso de que esta opción sea imposible, seguramente, esta persona comience a sentir un profundo malestar generado por el miedo que siente ante la posibilidad de sufrir un ataque de pánico o cualquier síntoma similar a la angustia.
Estrés, ataques de miedo intenso, taquicardias, sudoración, aumento de la frecuencia cardíaca, temblores, sacudidas, sensación de falta de aliento, náuseas, molestias abdominales, sensación de pérdida de control, miedo a morir, parestesias, sofocos, escalofríos,…. Son síntomas característicos de este trastorno.
Además, estos síntomas suelen ser interpretados como parte de un trastorno físico y por ello solicitan un examen médico después de esta primera experiencia. Pero este examen médico no revelará ningún problema físico que explique la causa de semejante malestar. Después, habrá pacientes que sigan pensando que padecen alguna enfermedad física que no ha sido identificada. Por ello, se van generando un montón de consultas al médico en las que se busca una explicación a lo que padece y poco a poco se va aislando de su entorno lo que aún dificulta más la recuperación.
No obstante, la mayoría de las personas agorafóbicas no tienen una conciencia clara de que, muchos de los síntomas que padecen, tanto de orden psíquico como de orden físico tienen un punto en común: el miedo irracional y la sensación de desprotección.
Es un trastorno que puede padecer cualquier persona. Generalmente se inicia en una edad temprana, se dispara en la adolescencia y alcanza su mayor frecuencia a en la década de los cuarenta…
Posibles causas en la Agorafobia.
Al igual que la mayoría de trastornos de ansiedad, este también afecta más a mujeres que a hombres. Todavía se ve más acentuado en el Síndrome Premenstrual Disfórico, trastorno femenino caracterizado por síntomas de depresión severa, irritabilidad y tensión antes de la menstruación.
Así mismo, es mucho más probable que lo sufran personas muy perfeccionistas, obsesivas o con antecedentes familiares de otro tipo de trastornos psicológicos.
Un nivel elevado de estrés, el consumo de tabaco y cannabis también aumenta el riesgo de padecer Agorafobia.
¿Es posible un tratamiento efectivo?
Sin lugar a dudas sí.
Las terapias en la agorafobia son altamente efectivas. Se plantean objetivos como: eliminar los ataques de pánico, disminuir la ansiedad y la depresión, suprimir la medicación sin recaídas, fortalecer la capacidad de afrontamiento a las situaciones temidas sin padecer estrés.
El porcentaje de éxito en la consecución de estos parámetros es altísimo.
La mejor manera de eliminar las conductas de evitación, las limitaciones y el malestar que provoca este trastorno es haciéndole frente con la ayuda de un profesional especializado.
Fuente: Helena Gorostidi Zambrana
También te puede interesar
Efectos psicológicos relacionados con el covid 19
Síndrome de Asperger : Qué es y cómo convivir con él
Como enfrentarnos al Covid-19