El Alzheimer está catalogada como una enfermedad grave, con afección directa a la memoria y el comportamiento de cualquiera que la padece. Lamentablemente, afecta a un porcentaje relevante de personas que superan los 65 años de edad, siendo más frecuente conforme avanza la vejez, y los síntomas también aumentan.
Se trata de una enfermedad progresiva y que actualmente no tiene cura, aunque se trabaja sin descanso para encontrar algún medicamento que pueda retrasar su desarrollo.
Por eso es recomendable tomar medidas para el cuidado personas de aquellas personas mayores que sufren Alzheimer. Una patología que hay que distinguir de otros episodios como la demencia senil.
Después de más de una década, la empresa de biotecnología Biogen de Cambridge, ha llevado ante la Administración de Alimentos y Medicamentos, lo que los expertos dicen que puede ser el «primer tratamiento real» para la enfermedad de Alzheimer.
Se llama “aducanumab”.
Durante los ensayos clínicos de Biogen, ha habido muchos altibajos y algunos de los resultados fueron mixtos; los participantes que recibieron el tratamiento pudieron retener su memoria y realizar tareas diarias durante más tiempo que los que recibieron el placebo.
Biogen anunció que la FDA aceptó su solicitud completa con los ensayos clínicos de las fases una a tres, para la aprobación del tratamiento.
Antes del “aducanumab”, los médicos solo podían ofrecer a los pacientes de Alzheimer, medicamentos que retrasarían algunos de los síntomas de la enfermedad, pero luego perderían eficacia. No podían hacer nada para frenar la progresión de la enfermedad en sí.
Pero al alterar el curso de la enfermedad de Alzheimer, el “aducanumab” podría ofrecer a los pacientes algo que ningún otro candidato a fármaco ha podido lograr: más tiempo.
Ésto esto cambiaría las reglas del juego, al menos para algunos de los pacientes, si se aprobara el “aducanumab”. Sería algo que ralentizaría su deterioro, que los mantendría en un lugar mejor durante más tiempo.
Es algo que los pacientes y sus familias han estado buscando desesperadamente.
El “aducanumab” es un anticuerpo. Se une a la proteína beta-amiloide, especialmente a las formas agregadas de la proteína beta-amiloide, que consideramos los principales tipos malos de la enfermedad de Alzheimer.
La enfermedad de Alzheimer comienza, en muchos casos, si no en la mayoría, con la acumulación de esta pequeña proteína llamada beta-amiloide y la formación de placas de beta-amiloide.
Existe mucha evidencia de que las personas con demasiada acumulación de esta pequeña proteína desarrollan Alzheimer. Ahora, “aducanumab” se une a la proteína beta-amiloide. Moviliza el sistema inmunológico del cuerpo contra la placas de beta-amiloide, y aparentemente elimina las propias placas.
El siguiente paso en la enfermedad de Alzheimer es la acumulación de marañas tóxicas de una proteína llamada tau, así como la acumulación de tau en una forma anormal llamada fosfo-tau.
En los participantes de los ensayos clínicos de Biogen, la carga de placa amiloide disminuyó y la carga de tau disminuyó.
Algunos expertos opinan que, si bien muestra un beneficio clínico y no hay duda de que elimina las anomalías del Alzheimer del cerebro, el grado de beneficio no es tan grande. Es una mejora muy pequeña. Pero aún así, algunos dirán que incluso si solo se aprecia una pequeña mejoría, es algo que se debería ofrecer a los pacientes.
Solo hay tratamientos sintomáticos que pueden ayudar durante unas semanas o meses, luego pierde su efecto.
Será algo extraordinario poder acudir a las familias y decir: «Por fín se ha encontrado el remedio».
También te puede interesar
¿Hipocondría o imaginación?
Síndrome de Waardenburg
Fibromialgia