Comer sano es un reto que diariamente se deben enfrentar para poder tener un mejor estado general de salud. Dice un viejo dicho “el pez muere por la boca”, y realmente este refrán popular tiene mucho de razón.
En dependencia de lo que se coma se estará más sano, aun cuando sea un poco difícil vencer la tentación.
Quizás por falta de experiencia, se asume que comer sano implica que la comida a ingerirse sea desabrida o simple. Con ingredientes saludables bien combinados y con un poco de creatividad se conseguirán sabrosos platos. Es muy importante cuidar la salud cardiovascular evitando las grasas y carbohidratos o eligiéndolos de una manera adecuada.
Es precisamente el saber elegir lo que se convierte en la solución a los problemas nutricionales. Por ejemplo al incorporar un carbohidrato a la dieta se debe tener en cuenta el horario en el cual se consumirá, el tipo de carbohidrato (si es procesado o integral), y la cantidad a consumir. Se vislumbra entonces que no solo importara que se comerá si no en que cantidad se hará.
¿Cómo saber qué cantidades se debe comer?
La alimentación es un proceso que debe ser evaluado por un médico y nutriólogo de manera individual. Esta se relaciona con factores como patologías de base, nivel de actividad física, sexo y edad. No podrá comer la misma cantidad un chiquillo de 15 años deportista, que una dama de 68 años jubilada que se dedica a cuidar el jardín.
En este ejemplo se puede notar como los factores de edad y actividad física inciden en las porciones y combinaciones de alimentos. La acertada elección de las porciones alimenticias garantizara la correcta absorción de nutrientes y por ende una mejor carga de energía en las actividades diarias.
Principalmente Evitar el déficit o excesos que son el detonante de las enfermedades relacionas a factores alimenticios, como diabetes, hipertensión y dislipidemias. Se debe recordar que lo aconsejado es consumir al menos 5 comidas diarias. Las mismas distribuidas en desayuno almuerzo y cena con dos meriendas, entre desayuno y almuerzo y almuerzo y cena.
Una porción representará la cantidad justa del grupo de alimentos a ingerir en una sola toma. Es la porción a consumir debe encontrase la mezcla correcta de carbohidratos, proteínas, grasas, azucares. No se deambulará por todos lados con una balanza, el ejercicio mental será conseguir equivalentes con artículos comunes para el cálculo.
Primeramente se tomará como ejemplo la palma de la mano la mismas con los dedos recogidos representa una taza. Cuando se calcula los carbohidratos se debe saber que una taza es la cantidad máxima permitida.
Ahora bien, si se quiere calcular media taza de arroz cocido, pues la comparación sería una pelota de tenis. Si se quiere saber a qué equivale una porción de frutas diversas cortadas pues el homologo sería una pelota de beisbol.
Una taza de lechuga para una ensalada corresponde a cuatro hojas de la misma. Una pieza de carne corresponde al tamaño de la palma de la mano.
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